Black Skylands
12/04/2024 - 09:25En Black Skylands nos sumergiremos en un mundo en el que encontramos multitud de islas flotando sobre las nubes y gentes curiosas que habitan esas islas y se mueven a través de ellas con barcos voladores. También encontraremos una región un tanto siniestra y peligrosa conocida como La Tormenta Eterna, y en una parte de ese mundo llegamos a Aspia, que es donde se desarrolla Black Skylands.
Nos encontramos ante un juego indie de acción con elementos de sandbox, simulador y pixelart. Es el primer juego del estudio con base Moscú Hungry Couch Games, y también se encuentra bajo las alas de la editora TinyBuild, conocida por editar juegos como Starup Panic, Despot’s Game o Hello Neighbor.
El juego nos muestra la historia a través de conversaciones y saltos temporales para entender qué es lo que ocurre. Tras el primer salto temporal hacia el presente, podemos ver que el enjambre está atacando Aspia, lo mismo que los halcones. En este punto tras el tutorial asumimos el control de la protagonista, Eva.
Tras un ataque de los halcones contra la Nave Nodriza, debemos despedir a los caídos y comenzar la reconstrucción… y la venganza. Al principio del juego se nos muestran las primeras mecánicas, y algunas son bastante simples como moverse con el teclado o saltar. También podremos empuñar armas diversas (pistolas, rifles, escopetas), y en los primeros combates se nos dan unas pautas donde apuntamos con el ratón. Podemos esquivar los disparos saltando, salvar distancias, lanzar a los enemigos por los aires con el gancho o evitar caernos al vacío. Unas mecánicas un tanto complejas que en algunos casos que requieren de algo de tiempo y coordinación para manejar bien.
Además de armas de fuego, tenemos la posibilidad de atacar a los enemigos cuerpo a cuerpo, aunque de manera muy simple. Incluso con toques de sigilo, puesto que atacar por la espalda a algunos enemigos sin ser detectado implica su eliminación al primer golpe. Incluso podemos recibir munición acabando con enemigos “a melé”.
También podemos navegar a bordo de barcos voladores de varios tamaños, siendo nosotros mismos el piloto. Los controles del barco son un tanto rudos, más que los controles del personaje y el combate, y dependen del barco y de los componentes personalizables que tenga. El juego en cuanto a los barcos que nos permite manejar tiene ciertos tintes de realismo. Por supuesto los enemigos podrán dañarlo o destruirlo, nosotros podremos repararlo con kits de reparación.
Como otros tantos indies, nos encontramos con un concept-art bello y pixelado. Sin embargo, es posible que pierda parte de su encanto debido a la perspectiva aérea. Los barcos, islas, etc. se ven bien, de manera nítida, pero en el caso de los NPCs o enemigos (salvo el enjambre), edificios y algunas cinemáticas… es algo peor, puesto que a veces cuesta distinguir una caja de un NPC quieto. El caso del enjambre se ve bastante bien, su impacto por sorpresa en algunas cinemáticas y misiones son muy acertadas. Podríamos decir que el apartado gráfico del juego no está mal, pero no es su punto fuerte.
La música, que va variando según el lugar y la situación, es en general relajada. Tal vez no sea merecedora de una “A”, pero combina bien con el gameplay. Se adapta al entorno.
Como conclusión podemos decir que nos encontramos ante un juego bastante interesante y divertido. Un juego que destaca por tener multitud de tareas por hacer. Con mecánicas divertidas, algunas complicadas, otras algo toscas. Por tanto, un juego en ese aspecto nada simple, bien elaborado en líneas generales. Algunas de esas mecánicas al principio son complicadas, pero con algo de tiempo eso no serán más que unos pequeños obstáculos. Un juego que mezcla varios géneros y subgéneros de forma adecuada.