My Little Universe

Los juegos de exploración y construcción han ganado una gran popularidad en los últimos años, y My Little Universe se presenta como una experiencia accesible pero adictiva, perfecta para quienes disfrutan expandiendo su propio mundo poco a poco. Desarrollado por Estoty y SayGames, este título indie apuesta por una jugabilidad sencilla, pero con un fuerte componente de progresión que lo hace difícil de soltar.

Expande, recolecta y evoluciona

En My Little Universe, comenzamos con un pequeño trozo de tierra flotando en el vacío. Nuestra misión es expandirlo utilizando los recursos que recolectamos, desbloqueando nuevas zonas, herramientas y materiales. La mecánica es simple pero efectiva: cortar árboles, picar rocas y conseguir minerales para mejorar herramientas y acceder a nuevas áreas.

A medida que avanzamos, el mundo se llena de vida con nuevos biomas, estructuras y enemigos que añaden un toque de acción. Hay una progresión constante que mantiene el interés, y aunque la mecánica puede volverse repetitiva con el tiempo, la sensación de crecimiento y descubrimiento logra mantener la motivación.

Estética colorida y sonido relajante

El apartado visual de My Little Universe es minimalista, con gráficos de estilo low-poly que le dan un aspecto encantador. A pesar de su simplicidad, los escenarios son variados y la paleta de colores cambia según los biomas que desbloqueamos, evitando que el diseño se vuelva monótono.

La banda sonora es relajante y acompaña muy bien la experiencia, sin ser demasiado intrusiva. Los efectos de sonido refuerzan la sensación de estar recolectando y construyendo, haciendo que cada acción tenga un peso satisfactorio.

Una aventura que engancha

Uno de los puntos fuertes del juego es la cantidad de contenido que tiene. Hay múltiples planetas por explorar, cada uno con sus propios desafíos y recursos. Además, se han añadido mecánicas como la construcción de estructuras y la lucha contra enemigos, lo que evita que el juego se sienta demasiado pasivo.

Sin embargo, la repetición de mecánicas puede hacerse notar en sesiones largas. Aunque siempre hay algo nuevo que desbloquear, el ciclo de recolectar y construir se mantiene constante sin grandes cambios en la jugabilidad.

Conclusión: un pequeño universo con gran potencial

My Little Universe es un juego perfecto para sesiones cortas y relajadas, con una progresión adictiva y un diseño accesible. Su combinación de exploración, recolección y construcción lo hace ideal para quienes buscan una experiencia sencilla pero satisfactoria. Aunque su jugabilidad puede volverse algo repetitiva, la sensación de expansión y descubrimiento lo convierte en una propuesta encantadora y muy disfrutable.