The Textorcist: The Story of Ray Bibbia

Lo primero que hay que decir sobre este título es que puede suponer un gran reto gracias a su mecánica diferenciadora, ya que no solo nos encontraremos luchando por sobrevivir en un juego de tipo bullet-hell, sino que además tendremos que teclear los textos de los exorcismos que son nuestra única forma de atacar a los enemigos.

Como se menciona antes, The Textorcist es un bullet-hell en el que nuestras armas son las teclas del teclado, pero las frases y oraciones que debemos teclear no son para nada sencillas. Encarnaremos a Ray Bibbia, un exorcista privado que combate a los demonios que invadieron la ciudad. Para enfrentarlos, además de la biblia que siempre nos acompaña, nuestra forma de atacar serán los exorcismos y textos que aparecerán en pantalla; todo esto dándonos un resultado muy frenético y rápido, ya que debemos evadir los ataques mientras tecleamos palabras en inglés y latín.

Hay que decir que la dificultad que nos presenta el juego resulta estúpidamente divertida. No solo se están poniendo a prueba nuestros reflejos, también la capacidad de adaptarnos a distintos enemigos y enfrentamientos. En total hay 10 bosses, cada uno con sus propios movimientos y ambientaciones que nos harán sudar hasta la última gota.

Los combates son bastante variados lo que hará que quedes totalmente encantado ya que las mecánicas que vamos aprendiendo se van sumando poco a poco. El combate básicamente implica evadir los ataques y escribir con el teclado. Al completar cada parte del exorcismo el enemigo recibirá daño, aunque si recibimos un golpe se nos caerá la biblia y tendremos que ir a recuperarla antes de morir para poder seguir recitando el exorcismo.

Sí, hay que reconocer que el juego es extremadamente difícil y estas mecánicas de combate lo hacen ser realmente divertido ya que no se trata del bullet-hell clásico en el que simplemente hay que evadir ataques y disparar. La mecánica de tecleo hace que sea un título único.

Visualmente es como ver un título de 16-bits, con sus sprites bien diseñados y los entornos llenos de pixeles y colores. La banda sonora por su parte intenta que tengamos ese sentimiento de aceleramiento al jugar, algo que logra bastante bien. El aspecto gráfico, en general, es genial, oscuro como se puede esperar de algo con temática de exorcistas y demonios.

Respecto a la historia, también llama bastante la atención la forma en la que se desarrolla, ya que resulta algo oscura y seria, pero con toques de humor que hacen que te guste aún más. Se trata de un juego muy interesante, absurdo en algunas situaciones, pero disfrutable de principio a fin.

Por otro lado, la curva de dificultad está muy bien nivelada, por lo que al final podrás presumir de tus habilidades con el teclado. ¡A exorciteclear!